Conclusión

Cada generación debe, por encima de cualquier oscuridad relativa de su época:
descubrir su misión, y después decidir
si cumplirla o traicionarla.

Frantz Fannon

Promover la educación creativa y cultural no será tarea fácil. Implicará una revisión progresiva de los estilos, propósitos y valores de la educación en todos los niveles, así como la inserción de la educación artística que permita el desarrollo creativo de los estudiantes. Requerirá una dinámica capacitación de maestros y otros actores, para que sean capaces de participar de manera positiva y creativa en el desarrollo e identificación de los talentos individuales de los jóvenes. Será necesario contar con la infraestructura y tecnología necesarias que coadyuven al logro de los objetivos establecidos. Será indispensable desarrollar un sistema que se autogestione y autoevalúe para lograr la mejora continua. Esto no es una opción sino una necesidad. El mundo del siglo XXI será diferente a todos los que hemos conocido. Lo mejor que podemos hacer es desarrollar las capacidades de los jóvenes de una manera sistemática, con la visión de promover el aprendizaje de por vida, para que así estén preparados para hacer frente a cualquier futuro.